Cuando El Hombre creó a Dios

por Antonio J. Fernández de Oliveira - antjfer

Es absurdo negar que en este Universo existe una inteligencia precisa, sincrónica, coherente y perfecta. Eso, entre otras cosas, para mí, es Dios.

Fui criado en un hogar católico, algo que debo agradecer al emperador Romano Constantino I, El Grande, quien asumió la religión católica para su Imperio y la impuso en Europa occidental. Las tribus de Celtas en Europa occidental, con alguna excepción, y las bárbaras tribus germánicas, tuvieron que cambiar a la diosa Tierra, o la diosa montaña, o el dios relámpago, etc… por sólo un Dios, Jehová. Además, por el hijo de Dios, Jesús de Nazareth, mejor conocido como El Cristo, el Mesías; por unos apóstoles, hombres santos por definición; y unos santos y santas (llamados así por sus “virtudes” en vida humana). Existe un personaje, El Espíritu Santo, si usted pregunta por él, nadie sabe mucho, sin embargo, es autor de algunas de las fechorías de Dios, como por ejemplo haber embarazado a María estando ésta casada con José. La religión católica, así como otras religiones, posee personajes maravillosos, por su calidad humana y fortaleza de espíritu, personas cuya existencia fue realmente digna y llena de virtudes, sin embargo, hay muchos otros, como los Papas, que son personajes políticos, unos cínicos que nos quieren convencer de unos “misterios”, que ellos saben, de antemano, no son verdad… “todo sea por la institución”, dirán ellos. Esto no es un ataque a la religión católica, no estoy en contra o a favor de ninguna religión, al final todas son necesarias para activar los procesos espirituales de los seres humanos.

La primera referencia occidental que tenemos de Dios fue escrita hace unos tres mil años atrás, y se encuentra en el Antiguo Testamento de la Biblia. En él, Dios crea el mundo en siete días, habla de un Adán, de una Eva, de unos pecados, Adán y Eva tuvieron dos hijos varones (Caín y Abel), nadie sabe cómo pero hubo más descendientes… habla de toda una descendencia y llega a Noé. Hay una destrucción de todo lo que había sobre la superficie terrestre, excepto Noé, su descendencia de Noé y unos animales elegidos. Luego se habla de más descendencia, etc... Yo me pregunto: ¿por qué Dios tardó siete días, por qué no cinco, o diez, o los que sean? Se me ocurre que el número siete (7), además de ser Cabalístico para la cultura Judía, corresponde, aproximadamente, a los días que tarda cada fase lunar sideral, he tratado de descubrir otra respuesta, no la he encontrado aún. Así como tampoco entiendo porque tenemos doce (12) meses en un año y no trece, correspondientes a meses de veintiocho días, que es lo más aproximado con respecto a las fases lunares siderales. ¿Por qué el número trece es un número prohibido y maldito?

Se dice que probablemente María Magdalena era una de los apóstoles de Jesús Cristo, pero claro, éstos tenían que ser doce (Una posible lucha de poder con Pedro convirtió a María Magdalena en prostituta, y así apareció narrada su vida en el Nuevo Testamento). Los Evangelios que componen el Nuevo Testamento se estima que fueron escritos por personas que probablemente nunca conocieron a Jesús Cristo, (he leído períodos que van desde 80 a 150 A.D.). ¿Por qué todas estas inconsistencias y números cabalísticos? Las respuestas no se encuentran con facilidad en La Biblia (el cual es libro maravilloso e inspirador), pero toda la incuestionable influencia que hemos recibido como las palabras de Dios en las religiones Cristianas, Islámica y Judía; parecen más a situaciones particulares de la cultura Judía que una manifestación global de Dios. Si leemos enteramente La Biblia, seriamente, encontraremos tal cantidad de inconsistencias, pecados aceptados, etc… Increíble (Los pecados se aceptaron y están documentados en La Biblia; a partir de cierto momento fueron prohibidos).

Dios no ha querido hablar con nosotros en los últimos siglos, ¿dos milenios?. En el caso del mundo católico envía a la Virgen María. En el caso del mundo hebreo, desde que Dios habló con Noé, Abraham, Moisés, etc., varios patriarcas hebreos, incluyendo a Jesús, no ha vuelto a hablar con los hebreos (o yo no me he enterado). Nadie ha visto a Dios, pero lo describen como un ser bondadoso, un padre benevolente. Aunque Dios creó todo, se enfrenta con el Demonio a manera de pares, me pregunto: ¿para qué crear un ser que luego nos hará la guerra y sembrará maldad en nuestro territorio? Dios creó al hombre pero el hombre tiene la culpa de todo lo que pasa en nuestro planeta, Dios queda eximido de los errores de esa creación… Éstas son algunas de las cosas que nos han querido hacer creer…

…Incongruencias sin fin…

La descripción de Dios en esas escrituras tiene detalles humanos, pero el verdadero Dios no puede serlo, porque de serlo, cuántas cosas no se hubieran destruido por errores de “funcionamiento”… Finalmente, estamos asumiendo que Dios tiene sexo y que es un hombre…

Entonces, ¿De dónde sale esa descripción de Dios? En mi opinión tiene que ser de la creatividad de la mente humana. ¿Por qué Dios fue creado de esa manera? Porque aunque los señores que escribieron esos libros eran muy inteligentes y sabios para su época, no era lo mismo decirle a la gente que fueron escritos por un tal Joseph, que decirle a la gente que La Biblia es una transcripción de la palabra y voluntad de Dios. Adicionalmente a esto, la inteligencia colectiva de hace tres mil años no era muy elevada, y había que controlar a la gente, pues su comportamiento era instintivo y básico; entonces, sembrándoles el temor a Dios, el castigo por el pecado, la gente se comportaría mejor. Luego, los líderes religiosos fueron Dios en la Tierra… (algunos aún creen que lo son) cuanto cinismo y perversidad. Por mucho tiempo fueron los líderes religiosos los que controlaron el destino de la gente. En la Europa medieval, un rey no era considerado como tal si el Papa no daba su bendición (por supuesto la decisión era política y negociada, cargada de un precio en oro y la obediencia de los súbditos del reino a la iglesia católica de Roma). Los católicos fueron bastante convincentes reforzando la Fe en Europa, o usted era católico, o usted era hereje. El fuego purificaría el alma herética de cualquier ser inteligente y retador. Los excesos a través del tiempo son brutales y genocidas. Esta manera de manejar la verdad dio paso a la creación de las sociedades secretas y varios movimientos disidentes.

La inteligencia del verdadero Dios (el creador de todo El Universo) está a la vista, nuestro planeta es un ejemplo de ello. Esta burbuja de carbono, que nos sirve de hogar, posee los elementos ideales para que se desarrolle la vida, tal como la conocemos. La distancia de La Tierra a nuestro Sol es la perfecta. La fuerza de la gravedad del planeta, así como la que ésta ejerce entre todos los cuerpos celestes de nuestro sistema solar, es la perfecta. Esta nave espacial posee mecanismos de protección ante las amenazas externas, nos provee de los insumos para desarrollar la vida humana, siempre tiende al balance, etc. En fin, todas las cosas que vemos a nuestro alrededor fueron hechas con una aguda inteligencia, y me atrevería a decir, perfección. Con ésta y muchas otras evidencias, debo decir que todas las cosas que vemos a nuestro alrededor fueron hechas por una inteligencia perfecta.

“La Astronomía y la Arqueología le han ido quitando responsabilidades al Dios”, una oración que leí en un libro de Carl Sagan y que me gustó porque la considero cierta. En nuestro Universo se estima que existen alrededor de mil millones de galaxias como La Vía Láctea, y que en cada una de las galaxias existen mil millones de soles como el nuestro (estime usted la cantidad total de planetas y de satélites como La Luna en nuestro Universo). Si Dios le dedicara un segundo de tiempo terrestre a la creación de cada elemento de nuestro Universo, el pobre Dios tardaría más de treinta mil millones de años para crearlo. Pareciera que los siete días de la creación, asumían: o que todos los cuerpos celestes ya existían, o que El Universo era El Sol, La Tierra, La Luna y unas estrellas lejanas (decorativas en el cielo). También nos hemos enterado que los científicos creen que nuestro Universo proviene de un “Big Bang”, es decir, no había nada y de pronto se creó nuestro Universo, a partir de un átomo primigenio. Algo por descubrir aún, me resisto a creer en esta teoría.

Un aspecto concerniente a la vida humana, desde un punto de vista más filosófico, corresponde a los eventos no esperados que experimentamos en algún momento de la vida. Estos eventos son “aparentemente” aleatorios, después asimilamos que no lo son. Este tipo de situaciones están llamando nuestra atención incrementalmente, llevándonos a pensar que La Vida no es como no enseñaron, retando nuestras creencias y nuestra cultura. Esto me hace pensar que tienen que haber algún tipo de Reglas Universales (que no son conocidas masivamente o que no han sido informadas apropiadamente), reglas que una vez transgredidas de manera involuntaria nos harán pagar un precio. La Vida Humana está basada en el amor, el odio y la rabia impactan nuestras emociones y severamente dañan nuestra existencia. Algunos autores han publicado Las Reglas Universales, para variar, algunos dicen que son doce, otros dicen que son siete. Sin importar cuántas son, Las Reglas Universales existen, son reales y merecen ser analizadas. Hasta ahora, hemos descubierto que todo que ha sido creado materialmente no es eterno: nuestras vidas, nuestro planeta, nuestro sistema solar, La Vía Láctea y probablemente nuestro Universo, desaparecerá algún día en el futuro. Hemos ido descubriendo el poder de nuestra mente y las comunicaciones a larga distancia. Un pensamiento tiene energía y hay energía en la creación de la materia, ¿seremos eternos en forma de energía? Quién lo sabe, lo que si parece ser cierto es que las entidades de Carbono tarde o temprano desaparecerán

El Dios que todo lo creó, esa inteligencia perfecta, pero que no es benevolente, cuyas leyes Universales se hacen cada vez más claras, versus el Dios de esas escrituras “sagradas”, no parecen ser el mismo, aunque ambos son magnánimos. Uno es impersonal y abstracto,”no puede ser descrito”, como dice el TAO TE CHING de Lao Tze: “ El Tao que puede ser descrito no es el Tao perfecto”; el otro tiene rasgos humanos, sobre todo paternales. Hace tres mil años cuando el pueblo hebreo había evolucionado lo suficiente como para empezar a tener serios problemas sociales, fue el momento en que el hombre creó a Dios.

Es al Dios creado por el hombre al que le reza la gente cuando eleva los brazos con dirección al “cielo” dándole gracias o pidiéndole un favor. Ese es el Dios que culpamos y le preguntamos por qué nos ha castigado, cuando tenemos un serio revés en la vida. Es el mismo Dios de una iglesia que vive en ostentación cuando muchos de sus fieles mueren de hambre. Ese Dios que parece no hacer nada por la felicidad del pueblo que creó pero que siempre es perdonado con una excusa de Fe. Ese Dios es un Dios imperfecto, así como somos todos los seres humanos. El enfoque humano de Dios está tan arraigado en la cultura occidental, que más de un lector desechará este artículo sin darle crédito, aunque la verdad esté enfrente de sus ojos.

El Dios Universal, El Dios perfecto, La Inteligencia Suprema, no interviene tanto en los procesos humanos diarios. Somos nosotros los que nos gobernamos, somos nosotros los responsables de mucho de lo que pasa en este planeta. Yo creo que Todos, y Todo lo que existe, somos parte de Dios. Nuestra inteligencia singular es probablemente lo único en lo que nos podríamos parecer a Dios. Estamos en un proceso evolutivo global, Nosotros, La Especia Humana, como organismo viviente, tenemos la misión de Vivir, de mantener la existencia. Iremos por El Universo consumiendo recursos, desarrollando conocimiento y tecnología; nos iremos mudando de un lugar a otro, con tal de mantener la supervivencia de la Especia Humana. Somos seres espirituales y nuestra labor es descubrir como sacar provecho de los recursos de El Universo y conocernos mejor. Ninguna creencia mezquina podrá detener ese proceso, porque por eso existimos. Todo lo que ocurre en la vida de este Universo, posee una sincronía. Por ejemplo, gracias a los dinosaurios hoy tenemos gran parte de la energía para el desarrollo humano. Nuestra existencia no es un azar. Estamos cargados de paradigmas históricos.

Al final, yo siento y creo, sinceramente, que somos seres espirituales. No es un individuo o grupo de individuos lo que es importante, es el todo. Un individuo es tan sólo una célula en un organismo mucho mayor. En un futuro cercano no habrá ninguna creencia controladora que pueda detener este proceso evolutivo. Yo podría decir que los dinosaurios existieron para soportar nuestro desarrollo actual y que ellos desaparecieron para que nosotros pudiéramos existir, todo en el tiempo correcto. Ese “supuesto” asteroide que golpeó Yucatán, que asesinó a los dinosaurios y que cambió las condiciones de nuestro planeta; no llegó por azar.

Tenemos que tener el compromiso de hacer que nuestras culturas evolucionen. Tenemos que luchar contra los paradigmas históricos encontrando LA VERDAD. No creo en mensajes apocalípticos ocultos en La Biblia o cualquier mente desesperada tratando de convencernos que los seres humanos nos destruiremos a nosotros mismos. La Biblia en El Nuevo Testamento habló acerca de una situación particular del pueblo Judío tratando de sobrevivir las atrocidades del Imperio Romano. Posiblemente Jesús cuando sacrificó su vida lo hizo por el pueblo Judío y no por el resto de la humanidad, como ha sido dicho. Para el momento que existió, hubo pueblos que existieron en muchos otros lugares y él nunca lo supo.

Entiendo que las religiones Cristianas representan treinta por ciento (30%) de la población mundial, siendo los católicos alrededor de quince por ciento (15%). ¿Qué sucede con el resto del mundo?, comprendido por 6,7 Millardos de personas, ¿no son ellos hijos de Dios? Todos estos pueblos tienen culturas diferentes y por ende creencias distintas, debido a que las religiones están conectadas a las culturas. Las religiones representan diferentes sabores para diferentes culturas y distintas maneras de pensamiento. En mi caso me declaro agnóstico pero creyente de Dios, creo en una inteligencia perfecta de la cual nosotros somos parte.

Finalmente, cuando el hombre creó a Dios nunca se imaginó del impacto que ese hecho podría tener a lo largo de las generaciones subsecuentes. No importa en lo que usted crea o cual sea su religión, la Oración es fundamental, desear con nobleza sin esperar nada a cambio. No importa si usted tiene o no un icono que le inspire a rezar, lo importante, al margen del mecanismo que use, es que usted dispare los elementos mentales-espirituales que le permitan tener una vida mejor. Detrás de la virtud está la paz y la felicidad. Como dijo Lao Tze El Universo es Mental.